Un hincha ingresó al campo del estadio Lusail e interrumpió el partido Portugal-Uruguay de este lunes con la bandera del orgullo LGBTIQ+ y una remera con reclamos por Ucrania y las mujeres de Irán.
El hombre -que también vestía una remera azul con logo de Superman en el pecho y el mensaje «Salvemos Ucrania» abajo y, en la parte de atrás, otro que decía «Respeto para las mujeres iraníes», ambos en inglés- llegó hasta el círculo central, hasta que fue interceptado por la seguridad.
La bandera quedó en el piso durante unos segundos y fue el árbitro del encuentro, el iraní Alireza Faghani, quien la levantó y llevó hasta uno de los costados de la cancha, hasta que fue incautada por un colaborador externo.
Esta se convirtió en la primera manifestación pública a favor de los derechos LGBTIQ+ que se produce durante el Mundial en un país que castigo con prisión las relaciones entre personas del mismo sexo.
En la previa del inicio de Qatar 2022, el repudio al país organizador aumentó cuando uno de los embajadores del Mundial, el exfutbolista qatarí Khalid Salman, calificó a la homosexualidad como un «daño mental».