Darío Benedetto, delantero de Boca juniors, no entrenó por cuarto día consecutivo con sus compañeros, por tener una tendinitis en su rodilla derecha que le impedirá jugar el jueves ante Monagas de Venezuela por la Copa Libertadores, y el titular será entonces Miguel Merentiel.
El jugador se entrenó diferenciado y sigue complicado por una tendinitis en su rodilla derecha, por la cual salió en el entretiempo en Mendoza, en la derrota del jueves pasado ante Godoy Cruz por 4-0, por la 21ra. fecha de la Liga Profesional.
El «9» no está pasando su mejor momento en el club de la Ribera, ya que las lesiones lo afectan con frecuencia, lo cual le quita ritmo de competencia. Y a ello se suma un problema personal que vive el futbolista.
Y como si todo eso fuera poco, los rumores de su salida de Boca se suceden: en las últimas horas, el jugador tuvo que salir al cruce de la versión que daba cuenta de su posible pase a Vélez.
A través de un posteo en Instagram, Benedetto publicó la desmentida: le sacó una foto al zócalo de un programa de TyC Sports, que decía que su representante, Christian Bragarnik, lo había ofrecido para ir a jugar a Vélez, y agregó una frase contundente: «No inventen más, muchachos».
— Darío Benedetto (@PipaBenedetto) June 27, 2023
Según dijeron a Télam allegados a la dirigencia boquense, la idea es que el jugador siga en Boca, club que ellos saben sería el único que jugaría en la Argentina. Y si hubiere una oferta del exterior se verá, pero tiene que ser importante para desprenderse del atacante.
En la práctica en el predio de Ezeiza, el entrenador Jorge Almirón no paró un equipo para preservar las cargas de algunos futbolistas como Marcos Rojo y Frank Fabra, ya que ambos vienen de estar desgarrados.
El posible equipo para jugar ante Monagas sería con: Sergio Romero; Marcelo Weigandt, Bruno Valdez, Marcos Rojo y Frank Fabra; Cristian Medina, Alan Varela y Martín Payero; Guillermo «Pol» Fernández, Miguel Merentiel y Valentín Barco.
La duda principal está en si el cuerpo técnico arriesgará a Nicolás Figal, quien tiene dos tarjetas amarillas y en caso de recibir una amonestación más, no podría jugar el partido de ida en la siguiente fase, ya que el «Xeneize» ya está clasificado para octavos de final.
Tras el entrenamiento de mañana en horario matutino, el plantel quedará concentrado por la tarde en un hotel del barrio porteño de Monserrat para esperar el encuentro ante el campeón de Venezuela.
Si Boca mantiene el primer puesto en el Grupo F le daría, en principio, un mejor posicionamiento en el sorteo de octavos de final de la Libertadores, que se realizará el miércoles 5 de julio en Paraguay.