En medio de la creciente protesta universitaria, que sigue cosechando apoyos de todos los ámbitos sociales del país y del exterior, centrado en números positivos de la macroeconomía como el superávit fiscal, la baja de la inflación y el riesgo país, y la suba de reservas del Banco Central.
El superávit fiscal conseguido en marzo, una de las principales metas de la actual administración, será la base del discurso presidencial a las 21 horas, que será previamente grabado y del que participaran el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, y el titular del Banco Central, Santiago Bausili.
Como si fuera poco, en este contexto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cuestionó el pedido de aumento de presupuesto para las universidades y denunció que hay algunos centros de altos estudios que “hacen un quiosco para ellos” con los fondos del Estado.
Patricia Bullrich adelantó que prevé aplicar el protocolo anti piquetes y advirtió por posibles “provocaciones”. Para la funcionaria de Javier Milei, la movilización está orquestada por “una universidad pública de una burocracia extrema, donde muchos hacen de la universidad un ‘quiosco’ para ellos”.
Se preguntó: “¿Cuánto le llega a cada estudiante del presupuesto universitario?, ¿Cuál es la relación entre la cantidad de estudiantes que entran a la universidad y los que se reciben?, ¿Cómo se calcula el precio por estudiante? ¿La cantidad de plata que se le da? ¿El valor del estudiante?”
“Las universidades argentinas tienen que sacudirse. Tenemos que meternos más en los problemas de la realidad”, agregó.