En medio de una auto denuncia del Tribunal de contralor de Villa Mercedes, por el robo de pruebas y documentación por parte de una organización proteccionistas, documentación perteneciente a causas penales que involucran al intendente Maximiliano Frontera, pero que compromete a Ricardo André Bazla, Secretario de Estado de Ética Pública y Control de Gestión del gobierno provincial, porque aparentemente se perdieron cuando integraba el tribunal de contralor municipal. El jefe político del presidente del tribunal Miguel Ángel Ferrero Domínguez, es José Giraudo quien conduce la Secretaría de Estado de Asuntos Institucionales y Enlace Parlamentario del gobierno provincial.
No se puede negar que en las últimas semanas se destacaron los escándalos provocados por los pedidos de auditorías desde el Partido Todos Unidos, cuyo presidente es Adolfo Rodríguez Saá, cargo partidario que también está en duda por parte de uno de sus expulsados, y ex funcionario de la ZAL, el periodista Hugo Murgo. La denuncia elevada también a Bazla para que investigue la gestión de Harold Bridger tuvo el efecto esperado, ya que el funcionario finalmente renuncio hostigado por el escándalo y las declaraciones de su propio sector por la supuesta falta de transparencia, que tampoco nunca se demostró, no es menor.
Como si fuera poco, la visita de la Vicepresidente de la Nación a Terrazas de Portezuelo, la cena posterior con Adolfo Rodríguez Saá, sumó rispideces entre el gobierno y los aliados, ya que están en carrera para las próximas elecciones legislativas donde los diferentes sectores se encolumnan, y estos hechos lo confirman, en una nueva estructura política con La Libertad Avanza a la cabeza, y todos los ¨oficialistas¨ provinciales van detrás, un tren donde parecen estar subidos de ante mano, aunque se sabe que no hay lugar para todos, la pregunta es quien sigue y quien se baja, o lo bajan.