Esa parece ser la respuesta del FMI de manera coloquial, ya que según los propios analistas del organismo no hay voluntad de desembolsar ni un solo dólar, luego de la revisión del acuerdo que lo ata a la Argentina a partir del préstamo que le otorgó a Mauricio Macri en 2018.
La portavoz del organismo, Julie Kozack, fue esquiva y no brindo precisiones en cuanto a desembolsos, en cambio, enfatizó los reclamos que le hace al gobierno argentino.
En la conferencia de prensa de este jueves, Kozack repitió los elogios a las autoridades nacionales por su “compromiso” con el programa vigente y resaltó que las metas del primer trimestre de este año se cumplieron “con amplios márgenes”.
Pero también agregaron: “El camino que le espera a la Argentina sigue siendo desafiante, y aprovechar estos primeros logros significa que las políticas tendrán que evolucionar en áreas que ya hemos discutido, mejorar la calidad de la consolidación fiscal para asegurar su durabilidad y equidad e impulsar una “evolución” de la política monetaria y cambiaria para “anclar” la inflación y acumular más reservas. El gobierno espera un desembolso de U$S 800 millones, pero también es cierto que el FMI está viendo la película completa y más de una vez también ha subrayado la necesidad de que el gobierno se ocupe de la cuestión social, como eje de una posible desestabilización política.